sábado, 10 de noviembre de 2012

VAMPIROS II. UN TIPO RARO (FRAGMENTO)


Muchas personas se asombran de que camine hacia atrás. Incluso algunas, pretendiendo hacer una gracia, me preguntan si sé bien por donde ando, o si tengo ojos en la nuca. Hay que ser estúpido para no darse cuenta de que mi emisor-receptor de ultrasonidos es tan eficaz para detectar los obstáculos como el ojo más agudo. Ahora ya me he acostumbrado, pero durante los primeros años de mi vida, la atención de la gente fue una pesadilla para mí, que consideraba perfectamente normal el hecho de que mis pies prensiles estuvieran alineados con la nuca. La cosa era lógica. Si no tuviera los pies hacia atrás, ¿Cómo podría caminar de espaldas o dormir colgado de una barra cerca del techo?

MARIANO SANZ

No hay comentarios:

Publicar un comentario